Paco Ibáñez volvió a Madrid después de más de 14 años, los días 6 y 8 de mayo en el Teatro Nuevo Apolo. La actuación llevaba el sugestivo título de “Palabras con alas”, donde se daba cabida no solo a sus canciones de siempre, sino también a una primera parte del concierto con un recital poético por parte de cuatro poetas representando las cuatro lenguas del Estado Español: Luis García Montero, Bernardo Atxaga, Joan Margarit y Antonio García Teijeiro. Cada uno de ellos recitaba dos o tres poemas en su lengua materna para acto seguido Paco Ibáñez cantar una canción en esa misma lengua.

Luis García Montero recitó “Democracia”, “La poesía”, “Rafael Alberti” y “Huerta de San Vicente”, a lo que P. Ibáñez respondió cantando “Balada del que nunca fue a Granda” de Rafael Alberti. Bernardo Atxaga leyó varios textos en euskera como “La vida según Adán” y “Arcaico corazón”, mientras que el cantautor respondió cantando una canción de su infancia vivida en su caserío familiar donde se crió en Guipúzcoa. Antonio G. Teijeiro recitó en gallego “Entre versos de Rosalía”, “Mientras pasaban los caballos de la noche” y “Palabras, palabras” entre otras poesías. Paco Ibáñez le acompañó con un poema de Teijeiro que había musicalizado por él mismo. Joan Margarit recitó en catalán algunas de sus poesías como fueron “La Libertad” o “Casa de Misericordia”, que fueron respondidos con entusiastas aplausos del público que llenaba el teatro, y que estaba entregado a la actualización desde el primer momento.

Se cerraba así la primera parte de la actuación, en la que la voz del cantautor y la poesía de las diferentes lenguas del Estado se juntaban para manifestar los derechos nacionales mediante la riqueza y la diversidad cultural que unen a los distintos pueblos.

Después de un breve descanso comenzó la segunda parte en la que Paco Ibáñez acompañado  por otros músicos fue deleitándonos con un repertorio en el que el público le iba acompañando en sus canciones más míticas, las cuales resonaban en el teatro como  himnos de libertad; recordando a los poetas que él ha puesto, a lo largo de tantos años, música a sus poemas. Se escuchó “Andaluces de Jaén” de Miguel Hernández para comenzar y le siguieron otros como León Felipe, Celaya, Alberti, José Agustín Goitisolo…y la poeta Fanny Rubio que se encontraba entre el público. Paco Ibáñez con su guitarra y la misma postura que tenemos en nuestra memoria, esta vez alternándose con el acompañamiento  en las diferentes canciones de un acordeón, una guitarra, un saxo o un contrabajo mientras  a coro con el público se podía oír “Palabras para Julia”, “Me lo decía mi abuelito”, “Como tú” y otras que estaban en la memoria de todos los allí presentes. Como no podía ser de otra manera, el concierto terminó con “A galopar” de Rafael Alberti con todos los poetas y músicos sobre el  escenario y la comunión perfecta del público entusiasmado que coreaba cada estrofa, lo que fue un himno contra el franquismo: ¡A galopar, a galopar, hasta enterrarlos en el mar!