Campos roturados: el campo y la contradicción constante

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En esta sexta publicación de la sección veraniega de novela obrera, desde Tinta Roja queremos hablaros de una de las obras magnas del realismo socialista soviético, "Campos roturados", realizada por la imprescindible figura, premio Nobel de literatura y baluarte indiscutible de la cultura soviética, Mijaíl Shólojov.

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En la obra se narra el desarrollo de la política de colectivización agraria en la Unión Soviética, exponiendo cada desavenencia en el camino y cada una de las contradicciones y tensiones fruto del choque entre los intereses de las distintas clases sociales en el campo. A través de personajes simples, encargados de levantar el Koljós, veremos cómo se lleva a cabo tal ardua tarea, la colectivización, en una pequeña localidad llamada Gremiachi, donde viviremos la evolución ideológica del campesinado, las dificultades de construir la vida colectiva y las conspiraciones contrarrevolucionarias de los Kulaks. Todo ello sin dejar de lado cierto aire satírico por los tópicos y las mentiras anticomunistas liberadas en la localidad para frenar el avance del Koljós. Bien podríamos describir a "Campos Roturados" como la obra de la contradicción constante: de la muestra continuada de ese choque entre intereses opuestos, así como la superación cualitativa de los conflictos fruto de esta lucha.

Su bien cuidada retórica, el tratamiento literario de impecable calidad, convierten a esta novela en una joya que nos atrapa e invita a reflexionar a cada línea que devoramos. Son sus travesías descriptivas, cargadas de profundidad poética y metafórica, las que suavemente, sin saturar ni aburrir, nos transportan por toda la línea narrativa, sumergiéndonos en una historia apasionante.

"...No era al salir para la aldea, tan ingenuo como hubiera podido creerse: pero la lucha de clases, con sus embrolladas madejas y sus infinitas triquiñuelas, no se la había figurado tan completa como le pareció desde el primer día de su llegada a Gremiachi. No acertaba a comprender de dónde venía aquella voluntad tenaz de casi todos los campesinos medios para negarse a entrar en el Koljós, a pesar de las inmensas ventajas que ofrecía la explotación colectiva. No daba con la clave que le hubiera permitido conocer bien a muchas personas y sus relaciones entre ellas. Borodín, ayer guerrillero rojo, hoy kulak y enemigo. Timofei Borschev, un pobre, tomando abiertamente la defensa del Kulak...".

Así reza uno de los párrafos de la obra, como gran ejemplo de los conflictos a los que tienen que hacer frente los protagonistas.

Poco más podemos añadir de "Campos Roturados", más que el que todo joven debería tener esta novela entre sus lecturas realizadas, amadas e interiorizadas, por el valor de sus enseñanzas y la fuerza del proceso de superación y construcción de una nueva vida, la vida socialista.

Esta obra puede descargarse pinchando aquí.

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