Unidad y Lucha Nº 294 - Marzo de 2012
Órgano del Comité Central del PCPE

HUELGA GENERAL

El debate sobre la necesidad de convocar una huelga general, en respuesta a la brutal contrarreforma laboral del gobierno Rajoy, está en la calle y en el movimiento obrero de manera creciente. CC OO y UGT parecen dar señales en el sentido de responder a este clamor generalizado. La iniciativa, con convocatorias ya acordadas, de huelga en Euskadi y Galicia a cargo de las organizaciones sindicales nacionalistas, presiona también sobre los sindicatos estatales. El éxito de las movilizaciones del mes de febrero también avala un apoyo amplio de la clase obrera a una jornada de huelga general.

 Por tanto, tan solo son medidas de cálculo de las cúpulas sindicales de CC OO y UGT las que basculan sobre esta convocatoria. Esta dirigencia sindical, instalada en el pacto social, sopesa cuantas ventajas e inconvenientes tiene la convocatoria de una jornada de lucha en estos momentos; pues en ella no existe ni la más mínima voluntad de cambiar la estrategia de pacto social y aceptación de la moderación salarial que ha llevado a la clase obrera a la situación actual.

En esta ocasión –si finalmente se convoca la huelga- es necesario realizar un gran esfuerzo para explicar a la clase obrera, y a los sectores populares empobrecidos por la gestión de los gobiernos de la oligarquía, que esta jornada de lucha hay que hacerla como continuidad de la huelga general del 29S de pasado año, y que no es un final sino un inicio del necesario proceso de movilización y lucha obrera en el actual escenario de la lucha de clases.

La oligarquía no a va a doblar su brazo a las primeras de cambio. Pero, además, la lucha no es por una concesión u otra, la lucha es por avanzar hacia la construcción de la sociedad socialista-comunista, que es la única salida que tiene la crisis estructural del sistema capitalista.

El PCPE asume, prácticamente en solitario, esta orientación política en el combate clasista. Las organizaciones reformistas actúan de comparsa del capital, tratando de humanizar el capitalismo.

Avanzar hacia la huelga general sin esta perspectiva de cambio social llevará a una parte de la clase obrera a una cierta frustración, al no entender el momento histórico en que luchamos hoy. Es responsabilidad del Partido intervenir en cualquier lugar para que amplias masas obreras comprendan cual es la tarea del momento, y que es necesario un cierto desarrollo temporal para acumular la fuerza suficiente para empezar a poner en dificultades el dominio oligárquico en nuestro país.

Por ello la tarea de las organizaciones de base, cuando se confirme la convocatoria de la huelga, es lanzar a todos los efectivos a la calle y a los centros de trabajo; para, desde el primer día, hacer llegar nuestro discurso a decenas de miles de trabajadoras y trabajadores, ayudándoles a posicionarse en la necesaria estrategia de acumulación de fuerzas, golpes sostenidos y masivos al poder, y todo ello con el objetivo del socialismo-comunismo. Esa es la tarea principal, que se acompañará de pintadas, pancartas, octavillas, etc.

Militantes de la revolución, en los momentos críticos del desarrollo de la lucha de clases nadie debe dejar vacío su lugar. A la ofensiva.

8MARZO

La crisis estructural capitalista afecta de una manera especialmente grave a la mujer trabajadora. En situaciones de quiebra de la economía familiar la mujer acude al rescate aceptando cualquier tipo de trabajo, pagado míseramente, y rebajando sus mismas capacidades profesionales, aceptando cualquier trabajo de menor cualificación.

Si en general la estrategia del capital es el abaratamiento del precio de la fuerza de trabajo, en el caso de la mujer esa estrategia se lleva a cifras aún más escandalosas.

La reducción de las prestaciones sociales afecta a sus tareas de cuidadora en el marco de la sociedad de conducta patriarcal y de género. Los recortes sanitarios, de la asistencia domicialiaria, de las actividades escolares, etc., todo ello viene a incrementar y a endurecer su ya agotadora doble jornada de trabajo.

Por ello este 8 de Marzo la lucha adquiere un más remarcado carácter de clase. La mujer, como colectivo doblemente oprimido, tiene que levantar el proyecto de emancipación social y de género frente a la involución que hoy impone el capitalismo, y el nuevo gobierno Rajoy con sus medidas que tratan de desmontar las limitadas conquistas de años anteriores.

SE LEVANTA EL MOVIMIENTO ESTUDIANTIL

Vuelve la población estudiantil a la lucha por sus derechos, y lo ha hecho empezando por la protesta contra los recortes presupuestarios en la educación, que están reduciendo por días la calidad de la ya deficiente educación pública de nuestro país.

La brutal represión policial responde al modelo del gobierno del PP que trata de matar cualquier movimiento antes de que se inicie. En esta ocasión les ha salido el tiro por la culata, y nunca mejor dicho. La brutal represión policial al estudiantado del Instituto Luis Vives de Valencia levantó una ola de indignación que se va extendiendo por todo el país. Han sido las enseñanzas del Mosad las que se han aplicado en Valencia.

Ahora es el momento de definir una estrategia y un programa para este movimiento emergente, que puede jugar un papel importante en el desarrollo de la lucha de clases en España. Unir el movimiento estudiantil con el movimiento obrero, que la juventud asuma que el futuro será socialista o no será, y que vivimos una etapa de profundos cambios históricos que les llevará a vivir en otro tipo de sociedad, son ejes centrales para la amplia movilización que está por venir.

En el interior del movimiento pugnarán las posiciones reformistas -cuyo programa no va más allá de dar algunos retoques al capitalismo-, y las posiciones aventureras -absolutamente carentes de proyecto político porque solo están instaladas en el juego-, y éstas dos se situarán frente a las posiciones revolucionarias que luchan por una salida socialista-comunista a la crisis capitalista como único futuro posible. Al mismo tiempo estará la presencia taimada de los servicios secretos policiales, que han mejorado notablemente sus tácticas de manipulación de masas. En esas condiciones han de luchar los CJC, y ganar liderazgo en la lucha política.