En la historia del arte, hay veces que genialidad y compromiso social se unen regalándonos piezas inmortales. Hay otras, en las que grandes artistas llegan a ser referentes durante su vida y, sin embargo, con el paso de los años el olvido se adueña de su obra. Josep Renau es claro ejemplo de estas dos situaciones, y hoy, desde Tinta Roja, queremos hacerle un homenaje.

Llegó a empapelar nuestras calles llamando a luchar con el partido comunista, siendo director de Bellas Artes se trasladó buena parte de los fondos del Prado lejos de los bombardeos fascistas, y encargó una obra que muy difícilmente dejará de ser parte del imaginario colectivo, El Guernika, a Picasso. Hoy, un mural suyo se esfuma entre las humedades de unos baños de un restaurante en Valencia(1), sin ninguna restauración a la vista. Sólo con motivo de su centenario, el IVAM realizó una exposición de su obra, haciéndose un poco de justicia ante el silencio impuesto por el franquismo.

En una Valencia en la que la influencia de artistas como Sorolla o Benlliure dominaba todas las artes, su estilo marcó una profunda revolución estética con aires del constructivismo y el dadaísmo de Heartfield. Hijo de pintor, pronto daría con su vocación, y muy pronto comenzó a aprender los oficios de pintor y litógrafo. Realizó carteles para el cine y trabajando en revistas como Cuadernos de Cultura, Taula de lletres Valencianes y Estudios, donde su obra como fotomontador empezaría a ser realmente reconocida por series como Los diez Mandamientos (1934), en la que criticaba los valores de la sociedad burguesa.

Ingresó en el Partido Comunista de España en 1931, sería director general de Bellas Artes (1936-38) y posteriormente director de la propaganda gráfica del Estado Mayor Central del Ejército de la República Española (1938-39), y serían unos años de intensa actividad artística y política en la que se darían la coordinación del Pabellón de la República Española en la Exposición Internacional de París, la Junta de Conservación y Protección del Tesoro Artístico (en la que asimismo dirigiría el traslado de obras del Prado) y el trabajo incesante como cartelista.

                                 

A este frenesí le seguiría el exilio a México con 32 años, una familia numerosa y la escasa ayuda que daba el gobierno mexicano a los exiliados. Mientras trabajaba para la Imprenta Galas, formó parte del grupo de artistas encargados de realizar el mural del Sindicato Mexicano de Electricistas Retrato de la Burguesía, entre los que se encontraba uno de los mayores exponentes del muralismo mexicano, Siqueiros, con el que compartiría una gran amistad.

Mientras tanto, el surrealismo llegaría al país por medio de la Exposición Internacional del Surrealismo en la Galería de Arte Mexicano, a lo que Renau respondería con la publicación de "Reflexiones sobre la crisis ideológica del arte", en el que criticaba la poca consecuencia ideológica del movimiento.

Tras esta experiencia, realizó otros murales en la ciudad de México, con un giro estético hacia el muralismo mexicano, entre ellos, el mural España hacia America (1946-50) en el Casino de la Selva en Guernavaca, cuya destrucción sería denunciada hace unos años.

Durante este periodo llevaría a cabo The American Way of Life, una serie de fotomontajes donde, a raíz de la influencia de la cultura norteamericana que pudo observar en México, la Guerra Fría y la "caza de brujas", hacía una vez más una crítica mordaz de la sociedad capitalista y el sueño americano.

                                                   

En 1958, recién nombrado miembro del Comité Central del PCE, daría el salto a vivir en la RDA, en Berlín, donde moriría habiendo vuelto ocasionalmente a la España de la Transición. Aquí le fue posible una mayor realización profesional, realizando films gráficos para la Deuscher Fernsehfunk, pudiendo editar la serie The american Way of Life y realizando murales al aire libre. Durante esta etapa se distanciaría del Partido Comunista de España (1972) y de la vida pública en general, pero le llegaría el reconocimiento internacional con su participación en la Bienal de Venecia de 1976.

 

 

(1)http://www.levante-emv.com/valencia/2012/04/30/mural-oculto-renau-sigue-restaurado-4-anos-despues-hallazgo/901307.html (10/1/16)

(2)http://elpais.com/diario/2001/07/18/cvalenciana/995483891_850215.html (11/1/16)

(3)Catálogo de la exposición "Josep Renau, Fotomontador", IVAM, 2006

(4)http://www.cultier.es/josep-renau-algo-mas-que-un-artista/ (12/1/16)

(5)http://web.archive.org/web/20100429180938/http://www.lajornadamorelos.com/suplementos/correo-del-sur/86142-josep-renau-en-mexico (12/1/16)