tintaroja.es


Síguenos en:

rss

Instagram CJC

YouTube
en Facebook
en Twitter

Mar19032024

Última actualización09:36:03 AM GMT


We are not brothers, electrónica para bailar y pensar

  • PDF
Usar puntuación: / 2
MaloBueno 

wanb

Del sintetizador a la gran industria moderna. Si hemos de catalogar la música de We are not brothers (WANB), nada mejor que recurrir a sus propias palabras: post industrial. «Nosotros no somos músicos nos dice Damià, uno de sus componentes, no sabemos tocar instrumentos, pero la música electrónica nos permitió, con máquinas, de forma autodidacta, empezar a crear». En este reportaje recorreremos la relación de WANB y su nuevo disco con la movida madrileña y valenciana, el universo obrero y la política, la máquina y el ser humano, la historia y la ciudad industrial de Alcoi, la escena underground valenciana, las artes visuales y una particular visión de la música.

Más allá de la «movida madrileña»

«III» fue publicado el 27 de febrero con Oráculo Records, aunque está en internet desde hace semanas. Quien ya lo haya escuchado se habrá encontrado nada más comenzar con dos iconos de la contramovida: Ana Curra, de Parálisis permanente, poniendo voz a «Europe is dead» y Esplendor geométrico, grupo estandarte de la música electrónica de los 80’, capitaneando el título del primer track. Para quien no estuviese al corriente, WANB viene a poner en primer plano que tras la movida de la edad de oro del pop español de los 70 y 80, hubo una riquísima cultura de variedad y experimentación musical, no tan apreciada por la historia y la oficialidad. Coincidimos con Damià en que esta debería ser recuperada y reivindicada, como una expresión artística y reivindicativa enorme, y les acompañamos en su intento. Si se permiten sugerencias, puede empezarse por [aquí] https://www.youtube.com/watch?v=yqd_4zUYhJo

¿Por qué esta reivindicación? ¿Por qué esta cultura quedó relegada? Aparte de los evidentes intereses económicos y políticos en un tipo de música más comercial, menos experimental y menos politizada, hay muchas razones, ninguna insalvable. «Opinamos que fue un movimiento infravalorado. Siempre se habla de la movida madrileña pero nunca de esta “submovida” o de lo que pasaba en Valencia o Galiza. La prensa musical que tenemos aquí, como la mayoría de cosas, es centralista: está en Madrid y en Barcelona en tanto que centros de poder económico del Estado Español. Allí las bandas destacan, salen más en prensa, pueden hacer más bolos, reciben más ayudas y bombo, mientras otros focos creativos no tenían ni tienen esa repercusión ni apoyo de prensa y discográficas. Nosotros queremos reivindicarlo y devolverlo a primera plana.» El caso es que ser una banda seria o popular no va ligado a hacer música fácil de escuchar ni música para vender y sonar todo el día en la radio, y por eso WANB huye de lo comercial para clavar sus raíces en el postpunk, la dark wave y los senderos más oscuros de nuestra historia musical.

¿Y ahora qué? Raves i clubs, la cultura underground en València

Preguntamos a Damià, con un punto de nostalgia y otro de ilusión, cuál es su visión de la escena de clubs, salas, colectivos y cultura musical en general. «Hoy la mayoría de salas no arriesgan, en los últimos años incluso ha habido que pagar para actuar en algunos sitios». No obstante, «el underground en València está supervivo, y más que en cualquier otra ciudad española. La Residencia, el Magazine, 16 toneladas, alguna ocupa, son garitos que dan un buen ecosistema a la ciudad y hace algunos años que la zona de València está viviendo una época dorada musicalmente». Sí que hay un buen circuito, concluye, aunque falle un poco la coordinación entre salas y entre bandas y también el número de conciertos: «algunos grupos tocan 20 veces al año en la ciudad y eso desgasta».

En cuanto a las raves, de las que València no mueve pocas, «desde hace algunos años se dedican a poner, hablando en plata, música de mierda: hard techno súper duro toda la noche sin ninguna melodía o cambio, y pasas diez horas escuchando un bombo a 200 bpm. Esa riqueza musical de las raves en los 2000 acid house, varios tipos de techno, dancehall, drum ‘n bass, jungle... se haya perdida». Aun con todo esto, que es una crítica musical, «consideramos que las raves tienen un valor social y cultural brutal».

La múica no está sola: luz, imagen, mensaje.

WANB ofrece un directo potente y, cuando las condiciones lo permiten, se visten de proyecciones en el escenario, de láser, de humo, de luces y sensaciones ópticas. Eso cuando no están poniendo música en directo a películas de Linch, como hicieron en el Centre del Carme en València y harán el 13 y 14 de marzo en el Atronador Fest, en Alacant. «Todo coordinado, luces, láseres y los visuales creados específicamente para el disco por Martí Guillén, imágenes concretas para cada canción totalmente acordes con la música, crean lo que queríamos: que el directo fuese una experiencia total, sonora pero también visual. Siempre intentamos complementar el proyecto con gente que aporte valor añadido con su arte». Y así lo ejemplifica lo que rodea al proyecto: ahora mismo están rodando con Crisalium Art Company un cortometraje basado en la canción de «Europe is dead», mientras que las fotos promocionales y del Artwork del disco están hechas por J. Furia y Jes Orquadi en el cementerio de Alcoi, único del Estado incluido en la ruta de cementerios ilustres europeos. La sesión tiene su significado: incluye fotos a las catacumbas donde yace el cuerpo del alcalde asesinado durante la revuelta del petróleo o en la pirámide donde descansan las cenizas de Ovidi Montllor.

 captura2

Entrando en temática, la esclavitud de las máquinas

Por si alguien tiene dudas, su música está hecha con máquinas; este artículo también, tus colegas no sueltan el móvil ni tu hermana la tablet. Además, muchos trabajamos diariamente con máquinas, motos, prensas, toritos, ordenadores. Preguntamos a Damià sobre estos fenómenos y reflexiona: «tenemos esa relación de amor-odio con las máquinas. Hacemos una crítica como los futuristas al hecho de que haya un avance tecnológico pero no social, por el que las condiciones de vida del pueblo no mejoran. Todos los perjuicios que esta era tiene para el trabajador tanto en el trabajo como en la vida personal: móviles, gps, redes sociales... nos los camuflan de bondades tecnológicas. Asistimos a una esclavización cada vez mayor de la clase trabajadora pero se nos vende como si fuese progreso, más libertad. Criticamos esto desde nuestra contradicción de trabajar y crear con máquinas.». Llamar a la destrucción de las máquinas, mientras éstas sean nuestras cadenas.

Un poco de historia: Alcoi y la revuelta del petróleo

Los sonidos industriales que florecen en el disco pueden escucharse en fábricas, almacenes y talleres de todo el País Valencià y de todo el mundo, però desordenadors. Concretamente, Alcoi tiene aún una pequeña parte de la potencia productiva que tuvo en otros tiempos. «Aquí todos hemos trabajado en fábricas o tenemos amigos o familiares que lo hacen. Nos hemos criado con estos sonidos». La máquina, la sirena, la rutina de fábrica, el metal, el telar, la sierra, el conflicto obrero, han sido el pan de cada día de la juventud de la comarca y eso se plasma inevitablemente en su música. No se olvide tampoco la influencia de la ruta del bacalao y sobre todo de los sonidos industriales centroeuropeos cuyo puerto de entrada a España era Valencia. Especial significado tienen para Damià los episodios de la revuelta del petróleo que, en un contexto de lucha de clases feroz, explotaron la confrontación hasta las últimas consecuencias asesinando al alcalde del pueblo y declarando Alcoi un cantón independiente, después de que aquel apoyara a la patronal contra las demandas de la clase obrera. «Son episodios que se habrían de reivindicar y recordar y, en cierta manera y salvando las distancias, repetir».

Música industrial para la clase obrera, un mensaje de rebelión

No hay duda de que un fantasma recorre «III». «Europe is dead» pretende lanzar un mensaje reflexivo sobre nuestra civilización: Europa, la UE, aquel gigante que nació como acuerdo comercial entre monopolios del metal, ahora se ha convertido en nuestro marco legal y cultural, en la organización que rige y limita nuestras vidas. Miseria y paro, muerte en las fronteras, represión de todas las libertades, fascismo, ausencia de soluciones para industria y agricultura y el pueblo que vive de ellas. Por ahí dicen que la canción está basada en una entrevista a Varoufakis; Damià aclara: «la canción está basada en aquella entrevista, pero hay que decir que no estamos del todo de acuerdo con lo que allí dice; lo respetamos mucho por algunas cosas que ha hecho, pero es verdad que ve todo con el prisma legal de la reforma. Sobre este tema tuvimos debate interno, aún teniendo ideologías muy similares. Yo no tengo una idea del todo concreta de cómo se tendría que hacer, pero sí tenemos claro que hace falta un cambio radical en la sociedad y en Europa, que no es más que una farsa dominada por lobbys quie sirven a los poderosos».

Por otra parte, pero unido, «L’enigmàtic martell de Ned Lud» pero, sobretodo, [«121 Xemeneies»] («chimeneas» para los no adoictrinados en català) https://www.youtube.com/watch?v=Hy4LLZZ-_Tw es un emocionante retrato hasta levantarnos todos los pelos del cuerpo de la esclavitud que supone para nosotros, la clase trabajadora, la actual forma de organización del trabajo: atados a las máquinas por salarios irrisorios, sin ser dueños de nuestro futuro, forzados a la rutina y al crujir de espalda, obligados a ceder la mayoría de nuestro tiempoa la burguesía para enriquecerlos más y más mientras nuestro sueldo mínimo sube un 0’mierda por ciento. La letra está basada en un estudio de Rafa Arques sobre la industria y la convulsión social y obrera en la comarca; simplemente escuchad y sentid, leed y pensad. «No sé cómo acabará esto comenta Damià, si estallaremos algún tipo de revolución o seguiremos todos haciendo el imbécil en el facebook por las tardes».

¿Qué quiere transmitir WANB?

En el directo, el objetico es dejar al oyente boquiabierto. No obstante, no solo hacen música para el directo, la fiesta y el baile, sino también pensando que pueda ser escuchada en casa. Es por eso que las canciones tienen su estructura, desarrollo, sentido, intros y outros, cosa que no es siempre habitual en la música electrónica. «Además, si tenemos un mensaje, queremos que la gente piense mientras baila: una canción que habla de la muerte de Europa, de la esclavitud moderna, el ludismo y el mundo obrero te lleva a la catarsis bailando pero también te deja un contenido para la relfexión». WANB crea porque son apasionados de la música, y ése es el objetivo principal de la banda, aunque, de paso, nos dejen reflexiones tan imporantes como aquellas sobre la tecnología, el modo de vida moderno, nuestra historia, nuestra clase, la miseria actual y la lucha. Aunque el grupo no se enfoca a la incitación de acción política, que a nadie le extrañe que «121 Xemeneies» acompañe a más de una plantilla cuando crezcan las huelgas y las luchas, cuando la clase obrera, principal compañera de las máquinas, quiera cambiar su relación con éstas; y con el mundo. «Allà on sorgeix la injustícia sempre neix la rebel·lia! Petroli, petroli, petroli...»


AddThis Social Bookmark Button

Enlaces

 

Campañas de la Juventud Comunista

mos   luchar

Síguenos en Twitter


Síguenos en Facebook