Desde la sección "Música y revolución" de Tinta Roja, tenemos hoy el placer de presentar a Bittah, una MC de Barcelona, sus comienzos en el rap se remontan a 2008 cuando empezó a rapear con compañeros de clase y del barrio en corros, atraída por la libertad para expresarse que da esta música. Desde el primer momento se decantó por temáticas de crítica social y reflexión política, sacando su primera referencia en 2009 (Conciencia reflexiva) que mostraba una marcada línea reivindicativa. Actualmente está preparando su próxima maqueta en solitario, "Sublimación" y otra referencia con la reciente formación Ascensa Furore.

Tinta Roja ha tenido la oportunidad de entrevistar a Bittah, sobre temas de actualidad como el movimiento estudiantil universitario y la lucha heroica de un barrio, Sants, que se ha puesto en pie contra el desalojo de Can Vies. También la hemos preguntado por futuros proyectos musicales que anda preparando y que pronto verán la luz. A continuación os dejamos con la entrevista.

No podemos esperar que de por sí una manifestación cambie las cosas. Antes y después las reivindicaciones tienen que adquirir una forma organizada para que la lucha alcance sus objetivos.

De tener una organización firme y unos objetivos claros depende mucho el éxito. El derrotismo que hemos acumulado tras años de retrocesos tiene que acabar. Para ello, los comunistas demostramos que nuestras maneras de actuar son diferentes. En las manifestación acudimos en bloque, organizados, coreando consignas y llevando las banderas rojas de la clase obrera. Porque sin una vanguardia las luchas se diluyen.

Hace poco me llamó la atención un artículo publicado en el periódico 20minutos sobre la dificultad que tiene el 40,9% de la población española para afrontar el gasto de una derrama necesaria para llevar a cabo obras de conservación y/o mantenimiento en una comunidad de vecinos.

Todos recordamos la lamentable campaña de los dirigentes políticos del Partido Popular jactándose de que iban a rebajar el precio de las matrículas universitarias en un 10%, mientras en los los anteriores la habían subido más de un 60. Este truco populista matemático no iba sólo, en el mismo paquete venían otras medidas, como por ejemplo, que los estudiantes extracomunitarios deberán pagar todos los créditos como si fuesen de cuarta matrícula, es decir, multiplicados por cuatro.