
Seguramente, uno de los temas de conversación más repetidos entre la juventud en las últimas semanas, junto a las elecciones del 26J, la Selectividad, la precariedad de los trabajos de verano, las vacaciones (o la imposibilidad de irse de vacaciones) y la falta de posibilidades de ocio económico y alternativo para el verano haya sido la Eurocopa de fútbol, que en estos días termina de disputarse en Francia. Seguramente, tú, joven, te guste o no el fútbol, has escuchado y participado en conversaciones sobre los equipos revelación, el varapalo de selecciones como España o Inglaterra, la disputa entre la tensa política francesa y la celebración de este evento o, incluso, habrás repetido la metáfora de “el opio del pueblo” criticando el poder de convocatoria de masas de este deporte.
Un partido que no sólo se juega en el estadio.
 
 








 
					 
					 
					 
					 
					 
					










