Para preservar conocimientos, ideas e información totalmente organizada surgen organismos como las bibliotecas. Otra de sus características fundamentales es que los usuarios podamos acceder a todo ese material informativo.
La reducción de dinero destinado a bibliotecas públicas provoca que este servicio se esté viendo afectado notablemente. Se reduce el catálogo de libros, e incluso, para acceder a determinados documentos o material visual hay que pagar por ello. El capitalismo ha encontrado otro negocio redondo limitando el acceso a la información y a la cultura por un determinado precio. Para ir supliendo estos problemas se crean diferentes Centros Obreros y Culturales que de una forma, todavía modesta, ponen la cultura al servicio de la clase obrera y los sectores populares.

















