
A día de hoy la juventud tiene poco ocio para escoger, vemos como las diferentes ofertas culturales (cine, teatro…) son excesivamente caras. Ven, también, como se les niega el acceso a distintas instalaciones como gimnasios, polideportivos, piscinas campos de fútbol, ya sea, una vez más, por su alto precio o porque directamente no hay este tipo de instalaciones públicas en su barrio. Se podría objetar que las nuevas tecnologías han creado nuevos tipos de ocio, pero son de un carácter individual y a veces hasta nocivo para la juventud, además de suponer un gasto importante. No, parece que la mejor opción es la de continuar en el parque con los colegas, viendo pasar el día y fumando unos porros.